En éstos meses se da una temporada de sequía preocupante, con vientos y altas temperaturas que complican aún más la situación. Estos tres factores crean condiciones adecuadas para el desarrollo de incendios y es cuando más atención se debe prestar.
La ausencia de lluvias, los días cálidos y ventosos predisponen a la vegetación a que se convierta en combustible para fuegos fuera de control, que pueden, como ya se ha visto, amenazar bienes y vidas de ciudadanos y ciudadanas, además de generar un serio impacto ecológico, con incendios en grandes extensiones de campo.
Tomar conciencia de las consecuencias y seguir las sugerencias para evitar su propagación es un compromiso que debe asumir toda la comunidad.
¿Cómo podemos ayudar a prevenir incendios fuera de control?
1. No prender fuego bajo ningún punto de vista en lugares no autorizados.
2. Apagar bien (mojar) las cenizas de fuegos ocasionales antes de descartarlas.
3. Comunicarse con bomberos al ver una columna de humo (100 o 911).
4. No quemar desechos forestales ni hojas de árboles.
5. No tirar colillas de cigarrillos: además de causar incendios, contaminan miles de litros de agua y el suelo.
6. No permita que los niños jueguen con encendedores o fósforos
7. Evite la quema de basura.
8. Mantenga el perímetro de su vivienda libre de malezas y no arroje botellas o vidrios en el campo.
9. Si va en viaje, no estacione con su auto en la banquina sobre pastos secos (calor del motor o caño de escape puede producir fuego.
10. En caso de llamar a bomberos, comunicar bien el lugar, posibles accesos y referencias.